Los mejores cuidados para tus suculentas
Las plantas suculentas o también conocidas como crasas, o plantas carnosas, tienen las hojas, el tallo y las raíces más gruesas para así poder almacenar mucha agua y poder adaptarse y sobrevivir a las épocas de sequía. Dicha adaptación hace que este tipo de plantas tengan un aspecto diferente e impresionante, harán que tu casa o jardín tengan un toque diferente y muy bonito.
Son plantas que además de ser muy hermosas, son pequeñas, por lo que ocupan poco espacio y son fáciles de ubicar dentro de nuestro hogar. Por lo tanto, pueden crecer en casi cualquier lado, ya sea en el interior o el exterior de tu hogar. Las suculentas son una excelente opción para tener un pedacito de naturaleza siempre cerca de ti.
Así como son unas plantas muy bellas, hay que recordar que como todas las demás, requieren de ciertos cuidados específicos para poder aprovechar al máximo y sacar su mayor potencial, a la vez, cuidarlas para que duren más y se mantengan igual de radiantes siempre. A continuación te daremos algunos de los tips y consejos fundamentales para poder cuidar adecuadamente tu planta.
- Regar adecuadamente según la temporada. Al igual que las personas, las suculentas necesitan más energía cuando están en su periodo de crecimiento. Durante la primeravera y el verano, crecren más, por lo que requieren mucha más agua que cuando estan en climas fríos. El exceso de riego puede llegar a matar a la suculenta, por lo que hay que tener mucho cuidado a la hora de volver a regar. Es recomendable dejar que la tierra se seque entre los periodos de riego, si los 5 cm superiores de la tierra están secos, es mejor comenzar a regar su planta.
- Asegurarse de que las suculentas tengan suficiente luz. A este tipo de plantas les encanta la luz y necesitan alrededor de 6 horas de sol al día, todo depende del tipo de suculenta que se tenga. Las suculentas bebés o que se acaban de plantar suelen ser un poco más delicadas en cuanto a la luz del sol. Pueden llegar a quemar si les da la luz solar directa, por lo que es mejor irlas adaptando poco a poco a este tipo de luz, esto lo puedes hacer poniendo una cortina transparente que les proporcione algo de sombra.
- Girar las suculentas con frecuencia. Como mencionamos anteriormente, estas plantas aman el sol, pero si la tiene en el mismo lugar siempre, es probable que un lado reciba mucha más luz que el otro, por lo que es muy importante estarlas girando para que todas sus partes reciban la misma cantidad de luz. Las suculentas suelen inclinarse hacia el sol, por lo que girarlas hará que se enderecen un poco.
- Regar el suelo directamente. Cuando riegues tus suculentas, es necesario remojar la tierra hasta que el agua salga por los orificios de drenaje de la maceta. En caso de que el recipiente no tenga agujeros para drenar, deberá utilizar menos cantidad de agua.
- Elegir un contenedor con drenaje. A las suculentas no les gusta estar en un suelo inundado o con mucha cantidad de agua, por lo que es importante tener una maceta con agujeros para drenaje, para así poder evitar que el agua salga y que no se lleguen a pudrir. El drenaje es indispensable para permitir que se escape el exceso de agua. Las macetas terracota son ideales para empezar.
- Mantener las suculentas limpias. Al estar en el interior de tu hogar, es probable que puedan recoger gradualmente algo del polvo que haya cerca. Hay que limpiar las hojas y espinas suavemente con un trapo húmedo o usar un pincel para llegar a zonas más difíciles de alcanzar.
- Utiliza el suelo correcto para plantarlas. Así como necesitan maceta que drene, también requieren tierra que haga lo mismo, por lo que la tierra de jardín no funcionará, es necesario elegi tierra para macetas con arena o perlita. Sus raíces son muy frágiles, por lo que es muy fácil trasplantarlas.
- Usar fertilizante en verano. En realidad las suculentas no requieren de mucho fertilizante, pero puedes darles una alimentación ligera durante su temporada de crecimiento que suele ser en primavera y verano. Hay que tener mucho cuidado ya que si se les da fertilizante en exceso, puede causar que la planta crezca muy rápido y por lo tanto se debilite.